martes, 17 de mayo de 2011

Delicia de encuentro a la riojana

Suena a receta de cocina. Y dado que compartí viaje desde y hacia Madrid con una cocinera profesional, viene bastante adecuado. Para preparar este plato hacen falta los siguientes ingredientes: un grupo de buenas personas, un precioso paisaje, unas buenas carnes y productos de la huerta, todo ello condimentado con abundancia de ganas de pasarlo bien y de conocer un nuevo lugar, si no se hubiese tenido oportunidad. Riéguese, a voluntad, con el maravilloso vino de la tierra. Déjese en manos de unos magníficos anfitriones la dosificación de este manjar y degústese, al menos, durante 36 horas. Solamente faltó un detalle, que no dependía de ninguno de los asistentes, para que todo fuera perfecto: las nubes impidieron que pudiésemos disfrutar en todo su esplendor del paisaje riojano. Peor para el Sol... Aunque viendo, envidioso, que no lo considerábamos del todo imprescindible, quiso participar de la fiesta, aunque con timidez, el domingo.
Laguardia/Biasteri

El IV Encuentro de El Lejano Oeste salió esta vez de sus límites geográficos y se celebró en La Rioja, a propuesta de Jose de Mingo, residente en esa tierra desde hace 27 años, y de donde es su esposa, Lourdes. Once fuimos los asistentes a esta reunión, además de los propios anfitriones. Hubo una mayoría abrumadora de ibienses (de nacimiento o por relación): Berta, Gonzalo, Maribel, Manolo, Celia, José Luis, Mari y El Chapras. La representación canguesa quedó dignamente personalizada en Pili y Pepe Baragaño, de Moal, que acudieron desde la vecina provincia burgalesa donde estaban pasando unos días. Se lamentó profundamente la ausencia de degañeses, lacianiegos y otros ibienses, que por motivos diversos no pudieron acudir. Pero muy especialmente se echó en falta a quien inició estos encuentros, María del Roxo, y que estuvo presente en el pensamiento de todos (incluso para bien).
Catedral de Logroño

Se me hace difícil resumir (y, sobre todo, recordar) todas las experiencias que vivimos en esos dos días. No se puede decir que hubiese lugar para el aburrimiento, y menos teniendo un guía como Jose de Mingo, que demuestra un conocimiento y una pasión por la tierra en la que vive sólo comparable a la que siente por Moal. Comenzamos el sábado haciendo una breve incursión en Viana (Navarra), para continuar después en Laguardia (Álava), donde, entre medias del recorrido por la población, probamos los vinos alaveses. Después de Laguardia, Elciego, y ya de vuelta a La Rioja, Lourdes y Jose no escatimaron kilómetros (al menos 300), tiempo ni esfuerzos para enseñarnos lo más representativo de la parte Noroeste de la provincia: San Vicente de la Sonsierra (pueblo de los famosos “Picaos”), Briones (donde visitamos el exterior de las Bodegas Dinastía Vivanco), Badarán (con visita guiada al interior de las Bodegas David Moreno), Berceo, San Millán de La Cogolla (donde vimos el sábado los monasterios de Suso y de Yuso) y Santo Domingo de La Calzada, donde a los más animosos les dió tiempo a echar unos bailes.
Monasterio de Yuso


San Vicente de La Sonsierra
¿Y tuvieron tiempo éstos, pensará alguno, para comer y cenar, y dónde lo hicieron? Pues hubo tiempo, y fue en Cordovín, el pueblo de la anfitriona, en la acogedora bodega familiar situada en el lugar, donde no faltó la carne (costillas, panceta, morcilla,...), perfectamente asada por Jose, y la verdura, todo ello mojado con el vino de la casa (nunca mejor dicho), que había que reponer con cierta frecuencia, postres, café, orujo,... Y repitiendo al día siguiente a la hora de la comida, no sin previamente disfrutar, en la plaza del Ayuntamiento, de un bocadillo de escabeche, olivas y, por supuesto, el vino de la tierra, típico ágape del día de San Isidro.
Cordovín


El domingo, aunque con algunas ausencias con respecto al sábado, pero no con menos ganas, fue dedicado a la visita del casco antiguo de la capital, Logroño. Muy interesantes, por su construcción y la riqueza de sus imágenes, los edificios religiosos. Finalizamos la ruta, antes de la comida, visitando el interior del monasterio de Yuso, que el sábado se encontraba cerrado.
Cordovín. Fuente de San Cristóbal

Y tan pocas ganas teníamos de marcharnos, que alargamos la sobremesa en Cordovín hasta tal punto que los que volvíamos a Madrid llegamos a la estación tres minutos antes de que saliese el autobús. Hace falta algo más que un límite de 48 horas para saborear todo lo que puede ofrecer una tierra como La Rioja. Habrá que volver...

(Más noticias y fotos en el blog "Villardecendias")

11 comentarios:

María del Roxo dijo...

Y yo me pregunto: ¿quién conducía?... porque menuda pandilla de borrachuzos. Si os llega a pillar la Benemérita, todos al calabozo al I Encuentro Bloguero entre Rejas!!!

Xastre dijo...

Ay, María. Con lo inteligente que eres y que te hagas esa pregunta... Conducía San Cristóbal, patrón de Cordovín.

Alto Sil dijo...

Mejor crónica, imposible. No echo de menos ni los caldos ni las carnes, pero seguro que el resto, y la compañía fueron magníficos. Gracias por la descripción detallada.

Alto Sil dijo...

P.D. Sí había una lacianiega: Berta, que es de Caboalles del Medio

mari dijo...

Vamos no se pude describir de un manera más extensa .
Xastre que paso que en San Millán te vino la inspiración por eso de que es la cuna de la lengua?
En este encuentro se propuso que el próximo se hiciera en al Viliella, por si a alguien se la olvidado.
Decir que las fotos de este blog son muy bonitas casi no se nota que el xastre estrenaba cámara.
un saludo

El chapras dijo...

Xastre,que te quedan por lo menos 3 capitulos,y en el primero,ya contaste el descubrimiento de America(en este caso del buen vino,que casi es tan importante),no te va a quedar nada para los 2 siguientes,aunque con que pongas las fotos,me parece que te va a sobrar tema.
En cuanto a la Benemerita,Maria,en este viaje,teniamos muy,pero que muy buena relacion con ella.

MARIA I. dijo...

Es casi tan buena la entrada como lo fue el viaje, y que decir de los anfitriones y de esa tierra tan bonita
Ya puedes pasarnos las fotos , con esa camara salen genial .... saludos a todos
Algo falto en este encuentro, la compañia de nuesta querida Maria ,la señora Marquesa...el bandido, alto sil, Angel.....

Jose de Mingo dijo...

Un placer leer tu relato Xastre. Han sido unos días vividos intensamente, en los que la compañía ha sido lo más importante. Aunque el sol, como bien dices, nos jugó una mala pasada, no fue obstáculo para poder enseñaros esta tierra de paisajes cambiantes en los que la mano del hombre se nota a cada paso que das.
El vino contribuyó a alegrar el espíritu, quitó el frio y ayudó a la camaradería. Además los conductores teníamos a San Cristobal, patrón de Cordovín, como aliado y la prudencia pudo más que el alpiste.
Gracias a todos por vuestro esfuerzo al venir a pasar juntos estos días y por hacer que todo resultase muy fácil.
El próximo encuentro.......¿para cuándo?

Milio'i Sebastián dijo...

gracias por el relato...

El Bao dijo...

Buena entrada Xastre, para completar, falta la tarde del sábado, ya que el Xastre llegó a altas horas de la madrugada, esa tarde noche dió para mucho, pudimos comprobar el ambiente que se respira en el casco antigüo de Logroño por la calle Laurel, los rotos con la copa de vino a buen precio, las terrazas nocturnas ya que ese día teníamos 21 grados a las 10 de la noche.
La compañía estupenda y los relatos de tiempos antaños por Ibias en la bodega de Jose y Lourdes fueron de lo más entrañables y el vino de Cordovin, para mi el mejor.

Rosa cunqueira dijo...

Luego que digan q a envidia ya sana , nin hablar! yo tengo muita envidia, si si el relato del cabreiru, como namas pensou en comer, todo con recetas, ya vimos nas afotos el pratu d.dimpiu del todu, taba buena a comida de seguro. Amas del vinu ese q ten q tar muitu bono, nin un gotin chegou a tierra cunqueira.
Que suertes ten dalguis, outrus trabachandu en tierra probe.
Un saludo YO voto q sea na Vilied.da el proximu alcuentru.